La primera vez que oí hablar del nuevo sistema de asistencia vocal de iZotope Nectar 4, pensé lo mismo que muchas veces antes con este tipo de promesas: “ya estamos otra vez con el marketing de la IA”. Pero después de unas cuantas sesiones de prueba, tengo que reconocer que hay algo aquí. No es magia, pero tampoco es puro placebo.
¿Qué promete Nectar 4?
Nectar lleva años siendo uno de los plugins más completos para tratamiento de voz: ecualización, compresión, de-essing, pitch correction, armonización… todo en uno. La versión 4 incorpora un asistente inteligente que, en teoría, analiza tu grabación y construye una cadena de procesamiento adaptada a tu voz y a tu estilo.
Esto suena muy bien en un PDF, pero en la práctica… ¿realmente funciona?
Mi prueba real: voces crudas, entornos reales
Decidí probarlo con tres voces distintas:
- Una voz femenina grabada con micro de condensador y preamp decente.
- Una voz masculina capturada con un micro dinámico directo a interfaz.
- Una toma casera con ruido de fondo y una interpretación no muy afinada.
En todos los casos, activé el Vocal Assistant, dejé que analizara unos segundos de audio y luego escuché la propuesta.
¿Resultados? Sorprendentemente útiles
No voy a decir que lo clava a la primera, pero sí acierta en la dirección general. Ajusta el de-esser con bastante precisión, suaviza frecuencias problemáticas en medios y propone una compresión bastante musical, sin matar la dinámica. En la voz 3, la más compleja, incluso activó un gate y ajustó el pitch correction con un gusto que me sorprendió.
Y lo mejor: todo queda editable. No estás atrapada en una cadena cerrada ni en decisiones irreversibles. Puedes modificar cada módulo o directamente remezclar la cadena desde cero.
¿Dónde se nota que sigue siendo IA?
Como era de esperar, el asistente no sabe leer intenciones musicales. Si buscas un sonido más crudo, deliberadamente sucio, o con efectos creativos poco comunes, tendrás que guiarlo tú. También tiende a “limpiar de más” en algunas voces, dejando un sonido algo plastificado si no vigilas el procesamiento.
Otra cosa: el módulo de armonías automáticas suena mejor de lo que esperaba, aunque no sustituye ni de lejos una interpretación real. Para coros sintéticos o refuerzos está muy bien, pero no da el pego en mezclas desnudas.
¿Milagro o placebo?
Ninguna de las dos. Es una herramienta potente, especialmente útil para productores/as con menos experiencia técnica, o para quienes necesitan resultados rápidos sin complicarse con 7 plugins distintos. No reemplaza al criterio humano, pero puede ayudarte a evitar errores clásicos en mezcla vocal.
Yo no lo usaría como preset automático final, pero sí como punto de partida inteligente. Y eso, sinceramente, ya es bastante más de lo que ofrecen la mayoría de los asistentes de mezcla actuales.